La forma de crear riqueza radica en la precisión en la predicción y la planificación, no en depender de la fuerza física. Comprender las leyes y trayectorias del funcionamiento de las cosas te permitirá obtener la llave dorada para resolver problemas. La diligencia por sí sola no conduce a la riqueza, solo puede llenar el estómago. La prosperidad depende de la comprensión de las tendencias y los nodos. La clave para obtener beneficios es tener una visión general de la situación y evaluar el momento adecuado, no necesariamente hay que cultivar personalmente; hacerlo por uno mismo puede hacer que se quede atrapado en la situación sin darse cuenta. La situación es la estructura, y la planificación y la estrategia, como la disposición de tropas en el campo de batalla y la planificación de operaciones, son más importantes que lanzarse al ataque.