La mayoría de las personas no se dan cuenta de que están respirando, porque el cerebro siempre está preocupado por el futuro o lamentándose del pasado. Y una respiración consciente es una meditación; puede devolverte instantáneamente al presente. Hoy hablaremos sobre cómo meditar correctamente. Muchos expertos practican la meditación todos los días y dicen que es una parte muy importante de la vida. Para meditar correctamente, primero debes entender el verdadero significado y propósito de la meditación: ¿por qué estas personas deben meditar? El contenido se puede dividir en tres partes:

Uno, principios fisiológicos de la meditación:
Las personas necesitan meditar porque en el cerebro existe un mecanismo que causa sufrimiento: la red neuronal por defecto DMN, que es como el “programa en segundo plano” del cerebro. Hace que divagues en pensamientos — preocuparte por el futuro, lamentarte del pasado, autorreflexión excesiva, preocuparte por la opinión de los demás, etc. Cuando no estás concentrado, esta red se vuelve más activa, lo que aumenta la ansiedad y el desgaste interno. Pero cuando entras en el estado de flujo mental, el DMN se pausa, y no piensas en cosas innecesarias porque estás completamente en el presente. La función de la meditación es, mediante la observación de la respiración y la concentración en el cuerpo, que vuelvas al ahora, como un entrenamiento físico para el cerebro. La práctica prolongada puede hacer que la corteza prefrontal se engrose, aumentando la conciencia, y permitiéndote detectar y gestionar las emociones más rápidamente, sin dejarte llevar por la ansiedad. La animalidad disminuye, y la racionalidad y la espiritualidad aumentan.

Dos, el significado esotérico de la meditación:
La mayoría de las personas entienden la meditación solo desde una perspectiva fisiológica, pero su verdadero propósito proviene de sistemas esotéricos más antiguos. La meditación tiene sus raíces en el yoga del Vedas indio, alrededor del 1500 a.C., utilizado para ofrendas y comunicación con los dioses. Muchas personas hablan de “invocar a los dioses” en realidad refiriéndose al sistema de despertar interior. Todo lo que hacen en realidad es lo mismo: acceder a una conciencia en dimensiones superiores. La descripción en los Vedas corresponde a una frase: “Todo en uno”. Significa que tu alma en sí misma es de alta dimensión. El objetivo de la meditación es que el alma tome el “volante” de nuevo. ¿Por qué el alma está sellada? Porque tenemos deseos, mente y conciencia formados por el “aprendizaje posterior” — deseos, apego, etiquetas, conocimientos que han solidificado nuestro pensamiento. Todos estos son cadenas que impiden que nuestro verdadero yo tome decisiones correctas. La raíz de estas cadenas es el DMN. Por eso, la práctica de la meditación consiste en domesticar el cerebro y hacer que el alma emerja. Después de meditar, experimentarás una claridad instantánea y sabrás qué hacer a continuación. Esa respuesta será la guía que proviene de dimensiones superiores.

Tres, métodos prácticos de meditación:
Es mejor meditar por la mañana, sentado en un lugar tranquilo, con la espalda recta, las manos sobre los muslos, palmas hacia arriba. Si puedes usar un buen sistema de sonido para reproducir el sonido “Om（唵）”, mejor aún, porque se considera la frecuencia originaria del universo, que puede despertar el alma. Los pasos son los siguientes:

Paso uno: relaja y respira, relaja todo el cuerpo, de la cabeza a los pies. Inhala suavemente, exhala lentamente, en una proporción 1:2. Siente profundamente cómo el aire entra en tu cuerpo, recorre todo tu ser, y luego expúlsalo. Haz 8 respiraciones profundas y lentas, y cada vez que termines, toca suavemente con el pulgar en un dedo. Concéntrate en la respiración, y si tu mente divaga, vuelve a traerla.

Paso dos: emite el sonido “Om”, inhalando, y al exhalar, emite suavemente el sonido “唵——”. Haz 8 respiraciones profundas.

Paso tres: observa la “pausa en la respiración”, cada vez que terminas de inhalar y exhalar hay una pequeña pausa. Enfoca tu atención en esa pausa. Tras cada ciclo, toca con el pulgar en un dedo, y repite esto 8 veces en total.

Paso cuatro: visualiza y expande, tocando el pulgar con el índice. Respira lentamente y profundamente. Imagina que estás rodeado y expandido por una luz dorada, y finalmente unido al universo. Dite a ti mismo tres veces: “Yo soy conciencia infinita.”

Cuando estés listo, haz una respiración profunda, abre lentamente los ojos. Sentirás el mundo muy claro, como si fuera nuevo. En ese momento, puedes hacerte una pregunta, por ejemplo: “¿Qué debo hacer ahora?” Escucha la primera voz que surja en tu interior, y di para ti mismo: “Eso es lo que voy a hacer.” Si tu corazón está en calma, actúa con firmeza.

El efecto de la constancia: practicando cada mañana, en una semana notarás un crecimiento acelerado: sentirás un control fuerte durante todo el día, mayor capacidad de ejecución, menos ansiedad, y cuando sientas desgaste interno, solo con unos pocos respiraciones profundas en proporción 1:2 podrás volver al presente instantáneamente.