Aquí está el verdadero dilema: cuando el gasto del consumidor se mantiene plano y las ventajas de exportación se desvanecen, hay un doloroso fork en el camino. O se inyecta más capital en infraestructura y manufactura—lo que significa acumular más deuda que ya es preocupante—o se acepta un crecimiento más lento de la producción, lo que trae números de PIB más débiles y presión en el mercado laboral. Ninguno de los caminos parece atractivo, pero quedarse quieto tampoco es una opción.
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FastLeaver
· hace7h
O bien las deudas se disparan, o bien el crecimiento se enfría, ambos caminos pueden desanimar...
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TokenVelocityTrauma
· hace7h
Deuda o recesión, hay que elegir uno, ¿verdad? Esta es la realidad.
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0xSleepDeprived
· hace7h
Deuda o recesión, realmente no hay elección... Cualquiera de las dos opciones es difícil.
Aquí está el verdadero dilema: cuando el gasto del consumidor se mantiene plano y las ventajas de exportación se desvanecen, hay un doloroso fork en el camino. O se inyecta más capital en infraestructura y manufactura—lo que significa acumular más deuda que ya es preocupante—o se acepta un crecimiento más lento de la producción, lo que trae números de PIB más débiles y presión en el mercado laboral. Ninguno de los caminos parece atractivo, pero quedarse quieto tampoco es una opción.