Últimamente siempre hay quejas: ¿Por qué esta ola del mercado es tan floja?
Muchos culpan a la escasez de liquidez, lo cual puede ser una excusa, pero la verdad no es la raíz del problema.
Lo que realmente mata el ritmo es el techo de valoración.
Mirando al ciclo anterior, cuando las nuevas monedas se lanzaban, una capitalización de unos pocos millones o incluso 100 millones de dólares ya era considerada altísima. Pero ahora? Un proyecto sale y ya empieza con varios cientos de millones o incluso miles de millones de dólares, absorbiendo instantáneamente toda la munición que el mercado puede usar.
Imagina esta escena: los grandes en el mercado primario y las instituciones ya han comido la parte más jugosa, ¿qué le queda a los minoristas en el mercado secundario?
Cuando abren, la cotización ya ha sido inflada hasta el cielo, y los que entran después terminan siendo los "tontos" que compran en el pico.
El entusiasmo del mercado aún no se ha despertado, y las balas en los bolsillos de todos ya están agotadas.
Esto no es casualidad, sino un problema sistémico. El mercado primario funciona como una bomba de agua que extrae los fondos que deberían fluir en el mercado secundario, impulsando monedas principales como Bitcoin, y al final el mercado secundario se convierte en un "campo de batalla para cortar cebollas" (recolectar ganancias).
Este esquema se asemeja un poco al ecosistema de A-shares en los primeros años — en esencia, se ha convertido en un juego de financiamiento en lugar de una inversión.
A menos que esta estructura sea rota, ese "época dorada" de oportunidades abundantes y monedas pequeñas floreciendo no volverá. Lo máximo que se puede esperar son ciclos alcistas rápidos o movimientos de ballenas — que llegan rápido y se van igual de rápido.
Si la estrategia de inversión todavía se basa en el antiguo esquema, en este entorno de mercado será cada vez más pasiva. Porque el flujo de fondos ha cambiado — antes todos compartían la torta y prosperaban juntos, ahora las principales instituciones toman la mayor parte primero, y solo después los minoristas luchan por las sobras.
Ver esto claramente no es para quejarse, sino para ajustar la estrategia. Deja de soñar con ganancias fáciles y aprende a sobrevivir en las nuevas reglas.
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RooftopReserver
· hace7h
A decir verdad, esa gente de nivel uno ya se ha comido todo el pastel, lo que nos queda a nosotros, los inversores minoristas, son los huesos.
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MetaverseHomeless
· hace7h
La gente del mercado primario realmente son vampiros, después de hacer subir los precios a niveles astronómicos, nos dejan a nosotros un montón de aire...
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gas_fee_therapist
· hace7h
En resumen, los principales inversores de primer nivel han arrasado con todos los cultivos de los pequeños inversores, y los inversores minoristas de segundo nivel no pueden sacar nada.
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MintMaster
· hace7h
De verdad, cuando el nivel uno hace subir la moneda al cielo, el nivel dos debería ir a dormir y lavarse las manos. No es de extrañar que últimamente todos sean víctimas de la compra a ciegas.
Últimamente siempre hay quejas: ¿Por qué esta ola del mercado es tan floja?
Muchos culpan a la escasez de liquidez, lo cual puede ser una excusa, pero la verdad no es la raíz del problema.
Lo que realmente mata el ritmo es el techo de valoración.
Mirando al ciclo anterior, cuando las nuevas monedas se lanzaban, una capitalización de unos pocos millones o incluso 100 millones de dólares ya era considerada altísima. Pero ahora? Un proyecto sale y ya empieza con varios cientos de millones o incluso miles de millones de dólares, absorbiendo instantáneamente toda la munición que el mercado puede usar.
Imagina esta escena: los grandes en el mercado primario y las instituciones ya han comido la parte más jugosa, ¿qué le queda a los minoristas en el mercado secundario?
Cuando abren, la cotización ya ha sido inflada hasta el cielo, y los que entran después terminan siendo los "tontos" que compran en el pico.
El entusiasmo del mercado aún no se ha despertado, y las balas en los bolsillos de todos ya están agotadas.
Esto no es casualidad, sino un problema sistémico. El mercado primario funciona como una bomba de agua que extrae los fondos que deberían fluir en el mercado secundario, impulsando monedas principales como Bitcoin, y al final el mercado secundario se convierte en un "campo de batalla para cortar cebollas" (recolectar ganancias).
Este esquema se asemeja un poco al ecosistema de A-shares en los primeros años — en esencia, se ha convertido en un juego de financiamiento en lugar de una inversión.
A menos que esta estructura sea rota, ese "época dorada" de oportunidades abundantes y monedas pequeñas floreciendo no volverá. Lo máximo que se puede esperar son ciclos alcistas rápidos o movimientos de ballenas — que llegan rápido y se van igual de rápido.
Si la estrategia de inversión todavía se basa en el antiguo esquema, en este entorno de mercado será cada vez más pasiva. Porque el flujo de fondos ha cambiado — antes todos compartían la torta y prosperaban juntos, ahora las principales instituciones toman la mayor parte primero, y solo después los minoristas luchan por las sobras.
Ver esto claramente no es para quejarse, sino para ajustar la estrategia. Deja de soñar con ganancias fáciles y aprende a sobrevivir en las nuevas reglas.