Se acerca el final del año y todos están cumpliendo objetivos.

Recientemente recibí tres multas por exceso de velocidad, resulta que en la carretera donde conducía libremente había un radar móvil, la velocidad límite es de 50 y con un pisotón en el acelerador es un asunto.

La llanta delantera derecha ha sido pinchada por clavos dos veces este mes, pero no estoy seguro de qué taller de reparación lo hizo.

Recientemente escuché que el dueño del lavado de autos al lado ha comenzado a criar palomas.

De hecho, las ventas deben crear demanda.