Lo que te mata más rápido que cualquier rug pull es ver cómo la esperanza de alguien se evapora en tiempo real.

Seamos honestos sobre algo que todos sabemos pero rara vez decimos en voz alta: hemos romanticizado el desastre en este espacio.

"Trading degen". Lanzamos la palabra como si fuera alguna identidad genial—como si fuera un distintivo de honor. Operaciones Yolo a las 3 de la mañana en memecoins. Apostar el dinero de tu alquiler porque la vibra de la comunidad parecía correcta. Liquidación tras liquidación, y sin embargo, de alguna manera la siguiente operación se siente diferente.

Pero esto es lo que realmente sucede: la gente no solo pierde dinero. Pierde a sí misma. El golpe financiero es brutal, claro. Pero el daño real? Es psicológico. Es el momento en que alguien se da cuenta de que apostó más de lo que podía permitirse perder, y no hay marcha atrás.

El espacio cripto necesita dejar de normalizar esto como solo "parte del juego". No es lindo. No es ambicioso. Es un mecanismo de transferencia de riqueza disfrazado de espíritu comunitario.