Las reuniones familiares son diferentes cuando estás inmerso en las criptomonedas. Ahí estaba yo en Acción de Gracias, tenedor en una mano, tratando de convencer a todos en la mesa de que Ethereum no está atascado permanentemente en $2,900.
¿Sabes esa mirada que te dan las personas? La que dice "claro, cariño, lo que tú digas" mientras pasan el puré de papas? Sí, esa. Pasé la mitad de la cena explicando cómo funcionan los mercados, cómo ETH tuvo sus días de gloria por encima de $4k, cómo los fundamentales siguen siendo sólidos.
Mientras tanto, la historia de mi cartera grita algo diferente. Ese momento incómodo cuando el Tío Bob pregunta si todavía estás "jugando con dinero de internet" y tú intentas sonar seguro mientras ETH se niega a moverse de ese número maldito.
¿La peor parte? Todos piensan que los precios de las criptomonedas son como... fijos. Como si ETH fuera solo $2,900 para siempre y ese es el trato. Sin volatilidad, sin carreras alcistas, sin nada. Solo buenas vibras y pavo.
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
11 me gusta
Recompensa
11
1
Republicar
Compartir
Comentar
0/400
BlindCryptoMama
· hace23h
Nuevo aquí. espero que me puedas seguir. Yo seguiré de vuelta
Las reuniones familiares son diferentes cuando estás inmerso en las criptomonedas. Ahí estaba yo en Acción de Gracias, tenedor en una mano, tratando de convencer a todos en la mesa de que Ethereum no está atascado permanentemente en $2,900.
¿Sabes esa mirada que te dan las personas? La que dice "claro, cariño, lo que tú digas" mientras pasan el puré de papas? Sí, esa. Pasé la mitad de la cena explicando cómo funcionan los mercados, cómo ETH tuvo sus días de gloria por encima de $4k, cómo los fundamentales siguen siendo sólidos.
Mientras tanto, la historia de mi cartera grita algo diferente. Ese momento incómodo cuando el Tío Bob pregunta si todavía estás "jugando con dinero de internet" y tú intentas sonar seguro mientras ETH se niega a moverse de ese número maldito.
¿La peor parte? Todos piensan que los precios de las criptomonedas son como... fijos. Como si ETH fuera solo $2,900 para siempre y ese es el trato. Sin volatilidad, sin carreras alcistas, sin nada. Solo buenas vibras y pavo.