Vi un punto de vista bastante interesante.

Un conocido profesor de finanzas, Wu Xiaoqiu, dijo recientemente una frase contundente: "El día que ya no haya quienes se apresuren a hacer una IPO, entonces las acciones A estarán realmente en el camino correcto."

Su lógica es muy simple y brutal: ¿quieres financiar 20 mil millones? Está bien, primero demuestra que puedes hacer que la empresa genere 20 mil millones de ganancias, y además, tiene que repartir dividendos en efectivo a los accionistas cada año. Haremos el trato de la reducción de participación después de que lo logres.

Según este estándar, se estima que la mitad de las cientos de empresas que están en espera de salir a bolsa tendrán que disolverse.

Suena a broma, pero pensándolo bien tiene sentido: cuando el mercado está realmente sano, la salida a bolsa debería ser algo natural, no el objetivo final por el que todos luchan. Al igual que los buenos proyectos nunca carecen de inversores, los activos verdaderamente valiosos tampoco temen no ser deseados.

Esta forma de pensar también es bastante aplicable al mercado de criptomonedas, ¿no crees?