Durante décadas, el dominio del dólar en su trono como la moneda de reserva preferida ha estado debilitándose—lentamente pero con seguridad. ¿La verdadera pregunta que flota en el aire? ¿Podría 2026 ser el año en que este cambio se acelere? A medida que los activos digitales y los sistemas financieros alternativos ganan terreno, el panorama monetario global podría estar encaminándose hacia una reconfiguración importante.