La línea de defensa del yen #数字货币市场回升 está en crisis, finalmente Tokio no pudo aguantar más.
Los amigos que han estado siguiendo el mercado recientemente deberían haber notado que el tipo de cambio del yen japonés frente al dólar estadounidense se acerca a la barrera de 155, una posición que ya está causando bastante incomodidad al Banco de Japón. No solo han aumentado los costos de importación, sino que la presión inflacionaria también está en aumento. La clave es que la semana pasada surgieron señales en el ámbito político: la nueva liderazgo mostró una postura más flexible respecto a las tasas de interés, lo que ha hecho que el mercado perciba un aire diferente.
Los miembros más hawkish previamente han estado dando señales, incluso el gobernador más cauteloso ha comenzado a discutir públicamente la "viabilidad de aumentar las tasas". La fecha clave es la reunión de política monetaria del 19 de diciembre, pero el banco central claramente está a la espera de las acciones de la Reserva Federal.
La lógica es simple: si la Reserva Federal reduce las tasas de interés, la presión de depreciación sobre el yen se aligera, y Tokio puede esperar hasta enero del próximo año para actuar; si la Reserva Federal se mantiene firme, el yen seguirá cayendo, aumentando la probabilidad de que se actúe en diciembre. La actual fijación del mercado muestra que la probabilidad de un aumento en diciembre es de alrededor del 40%, aunque el mercado de bonos ya ha reaccionado anticipadamente: el rendimiento a diez años ha alcanzado su nivel más alto en 17 años.
Esta señal es bastante clara: no esperes que mantengan la flexibilización para siempre. Si realmente se concretan las subidas de tipos, los fondos que han estado aprovechando el arbitraje del yen podrían regresar a su país de origen, lo que podría cambiar el patrón de liquidez global. Para los inversores con una estructura de posiciones más agresiva, la ventana de volatilidad podría llegar antes de lo esperado.
La gestión de riesgos debe ser la prioridad, especialmente en posiciones apalancadas. El mercado no siempre seguirá el guion, y es mejor tener un plan de contingencia preparado que intentar remediar la situación después.
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DegenTherapist
· hace10h
El Banco Central de Japón no puede contenerse y va a aumentar las tasas de interés, por lo que las trampas de arbitraje tendrán que hacer un rug pull, y la liquidez global va a cambiar.
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NFTRegretDiary
· hace10h
El Banco Central de Japón finalmente va a actuar, amigos de la trampa de arbitraje, tengan cuidado.
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BrokenRugs
· hace10h
El Banco Central de Japón finalmente no puede quedarse quieto, los fondos de arbitraje deben tener cuidado, este cambio de liquidez se avecina.
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MEVictim
· hace10h
El Banco Central de Japón finalmente va a actuar, los frens de la posición de arbitraje deben despertarse.
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SnapshotBot
· hace10h
El Banco Central de Japón finalmente va a actuar en serio, los fondos de arbitraje deberían hacer un Rug Pull, hermanos.
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tx_or_didn't_happen
· hace11h
¿El Banco Central de Japón realmente va a actuar? Los chicos con posiciones de arbitraje deben tener cuidado.
La línea de defensa del yen #数字货币市场回升 está en crisis, finalmente Tokio no pudo aguantar más.
Los amigos que han estado siguiendo el mercado recientemente deberían haber notado que el tipo de cambio del yen japonés frente al dólar estadounidense se acerca a la barrera de 155, una posición que ya está causando bastante incomodidad al Banco de Japón. No solo han aumentado los costos de importación, sino que la presión inflacionaria también está en aumento. La clave es que la semana pasada surgieron señales en el ámbito político: la nueva liderazgo mostró una postura más flexible respecto a las tasas de interés, lo que ha hecho que el mercado perciba un aire diferente.
Los miembros más hawkish previamente han estado dando señales, incluso el gobernador más cauteloso ha comenzado a discutir públicamente la "viabilidad de aumentar las tasas". La fecha clave es la reunión de política monetaria del 19 de diciembre, pero el banco central claramente está a la espera de las acciones de la Reserva Federal.
La lógica es simple: si la Reserva Federal reduce las tasas de interés, la presión de depreciación sobre el yen se aligera, y Tokio puede esperar hasta enero del próximo año para actuar; si la Reserva Federal se mantiene firme, el yen seguirá cayendo, aumentando la probabilidad de que se actúe en diciembre. La actual fijación del mercado muestra que la probabilidad de un aumento en diciembre es de alrededor del 40%, aunque el mercado de bonos ya ha reaccionado anticipadamente: el rendimiento a diez años ha alcanzado su nivel más alto en 17 años.
Esta señal es bastante clara: no esperes que mantengan la flexibilización para siempre. Si realmente se concretan las subidas de tipos, los fondos que han estado aprovechando el arbitraje del yen podrían regresar a su país de origen, lo que podría cambiar el patrón de liquidez global. Para los inversores con una estructura de posiciones más agresiva, la ventana de volatilidad podría llegar antes de lo esperado.
La gestión de riesgos debe ser la prioridad, especialmente en posiciones apalancadas. El mercado no siempre seguirá el guion, y es mejor tener un plan de contingencia preparado que intentar remediar la situación después.