Una importante firma de consultoría acaba de despedir a alrededor de 200 profesionales de tecnología a nivel mundial en la última semana. Este movimiento señala un cambio más amplio que está ocurriendo en los servicios profesionales, ya que las empresas se apoyan cada vez más en herramientas de IA para manejar tareas que anteriormente realizaban los humanos.

Esta reducción de personal no está ocurriendo de forma aislada. Varias gigantes de la consultoría están pasando por transiciones similares, apostando a que el aprendizaje automático y la automatización pueden hacerse cargo de ciertas funciones técnicas de manera más eficiente. Los roles en análisis de datos, codificación rutinaria y soporte operativo parecen ser particularmente vulnerables a esta ola de automatización.

Lo que llama la atención aquí no es solo el número, sino la velocidad. Un recorte de una semana sugiere que estas decisiones se planearon con mucha antelación, probablemente como parte de un cambio estratégico más amplio hacia operaciones integradas con IA. Para esas 200 personas, es un recordatorio duro de cuán rápidamente puede cambiar el mercado laboral cuando una nueva tecnología demuestra ser capaz de reemplazar roles tradicionales.

El mundo de la consultoría siempre ha vendido eficiencia a los clientes. Ahora están aplicando esa misma lógica internamente, utilizando IA para reducir costos y aumentar márgenes. Si esta tendencia se acelera o se estabiliza aún está por verse, pero una cosa está clara: los trabajos técnicos que implican trabajo repetitivo o basado en patrones están enfrentando una seria disrupción en todas las industrias.