En Shenzhen hay un caso de divorcio que ha dejado a todo el mundo Cripto atónito.

¿Qué se está disputando? 1500 monedas de bitcoin, que al precio actual equivalen a cerca de 1 billón. La parte femenina está bien preparada, con registros de transacciones, capturas de pantalla de transferencias y pruebas de chat, y creen que este dinero no se escapará. ¿Y el resultado? La parte masculina abrió su billetera fría en la corte, y en unos minutos, movió todos los activos.

¿Cómo lo decide el tribunal? La moneda pertenece a quien tenga la clave privada.

¿Esos capturas y registros? No valen nada.

Este caso no es solo un asunto doméstico, revela la ley de supervivencia más cruel del mundo Cripto: crees que tienes moneda, pero si la clave privada no está en tus manos, esos números no tienen nada que ver contigo.

Mucha gente aún no entiende la situación. Creen que los números que se muestran en la cuenta del intercambio son sus activos, y que los registros de transferencia pueden probar la propiedad. Despierten, el mundo de la cadena de bloques solo reconoce una cosa: la clave privada.

¿No tienes una clave privada? Solo estás mirando los activos de otros.

Lo que es aún más aterrador es que la mayoría de las personas gestionan sus claves privadas de una manera que es prácticamente como correr desnudo.

Las contraseñas son demasiado simples, como la fecha de nacimiento, el número de teléfono o 123456; los hackers podrían romperlas con los ojos cerrados. Los datos muestran que más del 60% de los robos de moneda criptográfica no son ataques de alta tecnología, sino que se deben a contraseñas ridículamente débiles. Proteger activos de millones o decenas de millones con una contraseña que hasta un estudiante de primaria podría adivinar, no es ser robado, es regalar dinero.

Hay personas que son aún más extremas, escriben la clave privada en papel, la fotografían y la almacenan en el teléfono, la envían a la nube como "respaldo". ¿Crees que esto se llama seguridad? Esto se llama una operación suicida. Si se pierde el teléfono, si la nube es hackeada, si se filtra la foto, cualquier problema en uno de esos pasos y tu moneda te dice adiós.

Recuerda una cosa: en el mundo Cripto, controlar la clave privada = tenerlo todo, perder la clave privada = perderlo todo. No juegues con tu patrimonio.