El año pasado en mayo vi un caso: un comerciante en el mundo Cripto perdió casi un millón de manera continua, y su cuenta se redujo a solo 3400U. En ese momento, se encontraba en una encrucijada entre cerrar todas las posiciones o seguir luchando hasta el final.

Finalmente, eligió la segunda opción, pero cambió por completo su forma de operar.

Al seguir estrictamente tres reglas de control de riesgos, estos 3400U se hicieron crecer a 120000, y luego se continuó con el interés compuesto: no solo se recuperó la inversión total, sino que también se logró una ganancia neta de más de 500000. Todo el proceso no tuvo operaciones milagrosas, se basó en la disciplina.

**Tres reglas de supervivencia:**

**Gestión de posiciones**——Límite máximo de una sola posición del 40%, siempre dejar el 60% en efectivo para enfrentar retrocesos; al alcanzar un límite de pérdida del 15%, detener pérdidas inmediatamente, es más importante preservar el capital que aprovechar oportunidades.

**La tendencia es el rey**——no predecir dónde están los máximos y mínimos, simplemente haz largas o cortas siguiendo la tendencia; intentar comprar en la parte inferior o vender en la parte superior contra la tendencia, de diez veces, errarás nueve.

**Bloqueo de beneficios**——Después de obtener ganancias, el 30% se reinvierte para aumentar los ingresos, y el 70% se retira directamente, convirtiendo los números de la cuenta en oro y plata.

No son pocos los casos de pequeñas inversiones que dan la vuelta. Hay quienes en solo diez días pasaron de mil U a cincuenta mil U, y también hay quienes al borde de la liquidación fueron rescatados por este método. La mayoría de las pérdidas no se deben a que el mercado sea demasiado difícil, sino a que pierden ante su propia arbitrariedad y mentalidad de suerte.

No es aterrador tener poco capital, lo aterrador es no tener un sistema. Actualmente, la volatilidad del mercado ha aumentado, coexistiendo oportunidades y riesgos. Aquellos que realmente quieren cambiar la situación deberían comenzar estableciendo una disciplina de trading: recuperar el control con reglas, y no apostando a la suerte por el mañana.