El cofundador de Ripple, Chris Larsen, acaba de soltar una frase clásica sobre lo que está roto en los asentamientos bancarios tradicionales: "El tiempo es dinero." Ese es el problema en sí mismo: los sistemas heredados se mueven a un ritmo de caracol mientras el valor permanece congelado. Esto impacta de manera diferente cuando sabes que XRP y RLUSD están construidos específicamente para resolver ese punto de fricción exacto.