¡El gigante biotecnológico Vivek Ramaswamy y su empresa Strive lo han vuelto a hacer! Entre finales del mes pasado y principios de este, compraron 1.567 BTC por un valor de 162 millones de dólares. Esta jugada se financió con dinero obtenido a través de la emisión de acciones preferentes para ampliar su reserva de criptomonedas.

Lo interesante es que Strive ha nombrado específicamente a un Chief Investment Officer para asesorar sobre la gestión de la tesorería en BTC, y además ha modificado las normas de gobierno de la junta directiva, eliminando el límite máximo de miembros. El propio Ramaswamy también ha aumentado su participación en la empresa, lo que demuestra claramente su confianza en esta dirección.

Esto refleja una gran tendencia: que las empresas utilicen BTC como activo de reserva se ha convertido en una práctica habitual. Strive se posiciona oficialmente como un “vehículo dedicado a la tesorería en BTC”, asegurándose un lugar en esta ola de activos digitales.