
Elon Musk, empresario y referente tecnológico de renombre, ha compartido públicamente en diversas ocasiones sus inversiones en criptomonedas. Musk ha confirmado en redes sociales que posee tres criptomonedas principales: Bitcoin (BTC), Ethereum (ETH) y Dogecoin (DOGE). Con su habitual ironía, Musk denomina a estos activos digitales 'ascii hash strings', una definición humorística que sugiere que las criptomonedas son, fundamentalmente, secuencias de datos cifrados.
De estas tres, Dogecoin ha sido la que más apoyo ha recibido por parte de Musk. Aunque ha valorado positivamente tanto Bitcoin como Ethereum en diferentes momentos, su relación con ambas ha sido compleja, combinando elogios y críticas. Sus declaraciones públicas sobre criptomonedas han movido mercados y generado amplios debates en la comunidad cripto.
Pese a los rumores, Elon Musk no posee ni dirige ningún proyecto propio de criptomonedas. Aunque muchos preguntan "¿cuál es la criptomoneda de Elon Musk?", la respuesta es clara: no ha creado ninguna cripto de su autoría. Su influencia pública ha inspirado el surgimiento de numerosos proyectos de memecoin que hacen alusión a su nombre o imagen. La criptomoneda más asociada a Musk es Dogecoin, que respalda públicamente pero no creó. Otros ejemplos son Floki Inu (FLOKI), que toma el nombre del perro Shiba Inu de Musk, aunque él mismo ha declarado no poseer este token ni haberlo respaldado.
Existen numerosos tokens con el nombre o imagen de Elon en el sector cripto. Los inversores deben ser especialmente cautos con estos tokens temáticos, pues suelen aprovechar la popularidad de Musk sin ninguna vinculación real. Musk ha manifestado públicamente que ninguna de sus empresas desarrollará jamás un token de criptomoneda, por lo que cualquier afirmación contraria es fraudulenta o engañosa. Ante la pregunta sobre la criptomoneda de Elon Musk, conviene tener claro que no existe ninguna cripto oficial de Elon Musk.
Elon Musk se ha convertido en uno de los principales promotores de Dogecoin, defendiendo la criptomoneda tanto por su origen humorístico como por sus cualidades técnicas. En distintos podcasts, Musk ha destacado la rapidez de las transacciones y las bajas comisiones de Dogecoin. Aunque reconoce que DOGE nació como una broma, considera que su blockchain la hace más adecuada para pagos cotidianos que Bitcoin.
Musk ha confirmado que posee DOGE, aunque nunca ha revelado la cantidad exacta. Su apoyo va más allá de la inversión personal, ya que varias de sus empresas han incorporado Dogecoin en su operativa. Tesla acepta DOGE para determinados productos, The Boring Company lo utiliza para el pago de viajes, y SpaceX ha anunciado la misión satelital DOGE-1, financiada con Dogecoin. Cuando se pregunta por la criptomoneda preferida de Elon Musk, Dogecoin destaca como su activo digital más respaldado públicamente.
No obstante, quienes deseen invertir deben ser conscientes de que el valor de DOGE es altamente especulativo. A diferencia de la propuesta de reserva de valor de Bitcoin o el uso de Ethereum en aplicaciones descentralizadas, Dogecoin presenta pocos casos de uso real. Además, DOGE tiene un modelo de suministro inflacionario, a diferencia del límite de emisión de Bitcoin.
La relación de Musk con Bitcoin se remonta a años atrás, cuando mencionó que tenía una pequeña cantidad de BTC enviada por un amigo. Sus actuales tenencias de Bitcoin no se conocen, aunque sigue mostrando interés por este activo. Ha manifestado posiciones políticas favorables al ecosistema Bitcoin.
El vínculo entre Musk y Bitcoin se amplía a través de sus empresas. Tesla adquirió 1,5 mil millones de dólares en Bitcoin y aceptó pagos con esta criptomoneda durante un breve periodo. La compañía justificó la operación como una estrategia para maximizar la flexibilidad y los rendimientos de sus reservas de efectivo. Poco después, Tesla suspendió los pagos en Bitcoin y comenzó a convertir parte de sus tenencias a efectivo, argumentando necesidades de liquidez. Tesla sigue manteniendo importantes reservas de Bitcoin.
SpaceX, otra empresa de Musk, también ha mantenido Bitcoin durante años. Se la considera uno de los principales poseedores corporativos de Bitcoin, con reservas valoradas en cientos de millones de dólares.
A pesar de sus inversiones, Musk ha criticado abiertamente a Bitcoin, citando el elevado consumo de energía de la minería como factor relevante en sus decisiones empresariales. También ha cuestionado el diseño técnico de Bitcoin, señalando que su velocidad de transacción podría mejorar y que su arquitectura refleja estándares de conectividad de internet ya superados.
Elon Musk ha confirmado públicamente que posee Ethereum, aunque nunca ha revelado la cantidad de ETH en su poder. Su posición respecto a Ethereum es más reservada que el entusiasmo que muestra por Dogecoin. Musk ha criticado el rendimiento de la red Ethereum, especialmente los problemas de lentitud y las altas comisiones, desafíos frecuentes en épocas de gran uso de la red. Aunque Ethereum está presente en su cartera, no se considera la criptomoneda de preferencia de Musk, ya que apoya de forma más activa otros activos digitales.
Elon Musk no apoya actualmente ninguna colección de NFTs y ha expresado su escepticismo sobre los tokens no fungibles. En podcasts, ha criticado la estructura básica de los NFTs, señalando que las imágenes asociadas no se almacenan directamente en la blockchain. Según Musk, este diseño obliga a depender de entidades centralizadas para alojar el contenido digital, contradiciendo el principio de descentralización propio de la tecnología blockchain.
Esta postura se reflejó en los cambios de política de X (antiguo Twitter) tras la compra de la plataforma por Musk. La red permitía mostrar imágenes de perfil NFT verificadas en blockchain, pero esta función se eliminó tras la llegada de Musk, en línea con su visión crítica sobre los NFTs.
El uso potencial de la tecnología blockchain en la administración pública es objeto de debate continuado. Diversos informes señalan su exploración para funciones gubernamentales como el seguimiento del gasto federal, la protección de datos sensibles o la gestión de edificios e infraestructuras estatales.
El contexto político muestra interés creciente en políticas favorables a las criptomonedas, lo que apunta a una expansión del interés institucional por la tecnología blockchain. Su aplicación para mejorar la transparencia y eficiencia gubernamental supone una oportunidad relevante más allá del ámbito financiero.
La cartera cripto de Elon Musk y su influencia en el sector de los activos digitales reflejan una relación compleja y en constante evolución con la tecnología blockchain. Aunque posee Bitcoin, Ethereum y Dogecoin, su apoyo más firme lo ha dirigido a Dogecoin, que destaca por su rapidez y facilidad de uso, pese a haberse creado como una broma. Para quienes se preguntan "¿cuál es la criptomoneda de Elon Musk?", la respuesta es que no ha creado ninguna propia, sino que respalda activos existentes, con Dogecoin como su favorita a nivel público.
A través de Tesla y SpaceX, Musk ha impulsado la adopción corporativa de Bitcoin y Dogecoin, aunque también ha señalado retos tecnológicos, desde el consumo energético de Bitcoin hasta la escalabilidad de Ethereum y la centralización de los NFTs.
Quienes inviertan o sigan el sector deben mantener la cautela ante criptomonedas vinculadas a Elon, ya que Musk ha asegurado que no dirige proyectos cripto ni que sus empresas crearán tokens. Identificar cuál es la criptomoneda de Elon Musk —o, mejor dicho, los activos que apoya— es clave para evitar fraudes. Su impacto en los mercados, a través de declaraciones y decisiones empresariales, demuestra cómo figuras prominentes pueden influir en la valoración de los activos digitales. Si la tecnología blockchain avanza hacia aplicaciones gubernamentales, la implicación de Musk puede indicar nuevos caminos fuera del ámbito financiero. Conocer realmente las tenencias y posiciones de Musk, más allá de rumores y proyectos que usan su nombre, es esencial para entender la intersección entre liderazgo tecnológico y activos digitales.
Elon Musk está asociado principalmente a Dogecoin (DOGE), a la que ha respaldado en numerosas ocasiones como la criptomoneda de la gente. No existe ninguna criptomoneda oficial creada por Elon Musk.
Brett (BRETT) y Pepe (PEPE) destacan por debajo de 1 $ como opciones con gran potencial en 2025. Analistas prevén que BRETT podría alcanzar entre 0,40 $ y 0,60 $, impulsado por la tendencia meme coin y mejoras en el ecosistema. PEPE ofrece oportunidades de alto rendimiento. Ambas presentan un fuerte potencial alcista este año.
No existe ninguna criptomoneda oficial de Elon Musk. Sin embargo, existen tokens no oficiales con su nombre, como Official Elon Coin. Son proyectos creados por la comunidad sin respaldo oficial y presentan riesgos elevados de volatilidad.











